Este año, debes abrazar el pijama de Acción de Gracias

Las celebraciones de Acción de Gracias con las que crecí fueron casi perfectas en Norman Rockwell: una gran familia reunida alrededor de las mesas vestida con sus mejores galas, un grupo de primos estridentes en los kids & apos; mesa, la abuela (y luego mamá) pasando el día preparando una impresionante fiesta de Acción de Gracias.

Y aunque definitivamente extraño esos grandes tradicionales días de Acción de Gracias, he desarrollado la receta para unas vacaciones perfectas, que creo que será la forma ideal de celebrar este jueves. Lo llamamos Acción de Gracias en pijama, y ​​podrías llamarlo el #BestThanksgivingEver.

La lista de invitados es pequeña (solo mi familia y nuestros amigos más queridos). El atuendo, como su nombre indica, es muy (muy) informal. El evento en sí es tan perezoso como humanamente posible: nos reunimos para comer bagels en algún momento durante el desfile de Macy & apos; s y pasamos todo el día comiendo, riendo y. hablando.

Hay un cóctel exclusivo (prosecco con un chorrito de jugo de arándano y un toque de lima, rematado con un borde azucarado y una ramita de romero, sin medir en Pajama Thanksgiving). El resto del menú, con la excepción de los macarrones con queso característicos de mi amigo, se ordena y se recalienta mientras comemos bocadillos, mezclamos otro cóctel o lo hacemos. videollamada esencial de vacaciones a nuestras familias lejanas, celebrando estados lejanos.

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Son las mejores vacaciones sin presiones, sin tener que lidiar con el tráfico de las fiestas, un mínimo de decoración y cocina. Ni siquiera tenemos que vestirnos. Y dado que es con la familia que elegimos, no existe el drama de 'cómo lidiar con tu primo que tiene creencias exactamente opuestas a las tuyas'.

Debido a que es 2020 y el pronóstico parece sombrío, la celebración de este año se ve un poco diferente. Nuestras familias pidieron cada una en su propio banquete de comida para llevar, y cambiaremos pastel y macarrones con queso al aire libre en algún momento más tarde en el día. Pero ya hemos decidido dejar nuestras computadoras de escritorio encendidas a través de Zoom o FaceTime, para que la gente pueda entrar y salir y charlar todo el día. Y levantaremos una copa a los recuerdos felices y a los días más felices que se avecinan.