5 estrategias simples para hacer que dejar ir el desorden sea más fácil

Como cualquiera que alguna vez haya intentado KonMari su casa Puedo decirte que ordenar no es solo un proceso físico, sino también un viaje emocional. Al decidir qué artículos dejar de lado, ciertas pertenencias de nuestro pasado seguramente traerán recuerdos y emociones. Dejar ir estos elementos puede hacer que se sienta aliviado, pero también puede inspirar sentimientos de culpa o tristeza. No importa si está empacando después de un divorcio complicado, practicando Limpieza de muerte sueca , o simplemente haciendo una rutina de limpieza, hay algunas estrategias que puede utilizar para facilitar un poco la limpieza. Eche un vistazo a los cinco consejos que aparecen a continuación para ayudarlo a deshacerse del desorden físico y emocional.

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Sacar una foto

A menudo, nos aferramos a elementos que tienen un significado emocional para nosotros, pero que ya no nos sirven. Cosas como los atuendos favoritos que sus hijos han dejado atrás durante mucho tiempo pueden caer en esta categoría. Pruebe este sencillo truco: tome una foto del artículo antes de donarlo. De hecho, un estudio de 2017 de Penn State University publicado en el Revista de marketing Descubrió que este simple acto puede hacer que esté más dispuesto a separarse de la pertenencia apreciada. La foto ayudará a mantener la memoria y el significado del artículo, sin tener que quedarse con el objeto en sí. Este truco puede ayudarte a dejar ir la culpa mientras liberas espacio en tu hogar (lo siento, pero no en el rollo de tu cámara).

Donar en lugar de vender

El mismo estudio analizó exactamente cuántos artículos dejaron ir los estudiantes universitarios mientras empacaban sus dormitorios al final del año escolar. A un grupo se le dijo que los artículos serían donados a una buena causa, mientras que al otro grupo se le dijo que venderían sus artículos a cambio de dinero en efectivo. Los resultados: las personas estaban más dispuestas a dejar sus pertenencias cuando creían que habían sido donadas a alguien que las necesitaba.

Pruebe este truco: si se siente triste o culpable por separarse de la ropa que no necesita o de los electrodomésticos de cocina que rara vez usa, dónelos. En lugar de pensar en el pasado y en tus propias emociones, el simple acto de donar cambia el guión, centrándose en el futuro del artículo y en cómo puede ayudar a los demás.

Llamar a un amigo

Si nunca vas de compras sin obtener la opinión de confianza de un amigo, ¿por qué ordenarías tu armario por ti mismo? Ya sea un amigo, un hermano, un primo o un compañero de cuarto, busque la ayuda de alguien en quien confíe, que lo haga sentir bien y lo apoye en su viaje ordenado. Luego, en persona o por video chat, déjeles que lo ayuden a decidir qué es lo que 'enciende la alegría' de la montaña de ropa apilada en su cama. Recuerde, en última instancia, es su decisión qué lanzar, pero un amigo puede ayudarlo a mantenerse encaminado. Además, ¿quién más te va a criticar por el hecho de que no has usado ese vestido de flores en más de una década?

Hágase algunas preguntas difíciles

Marie Kondo conocía la importancia de un proceso de investigación constante al ordenar, razón por la cual su pregunta, ¿Brinda alegría? se ha vuelto tan popular. Si eso funciona para usted, ¡siga preguntándolo! Pero si desea ser un poco más específico, pruebe este conjunto de preguntas para aclarar el desorden. El desorden puede ser muy emotivo, por lo que responder algunas preguntas objetivas equilibrará el proceso de toma de decisiones.

Lidiar con las emociones

Especialmente cuando se está despejando junto con un gran cambio de vida, como la muerte de un miembro de la familia, una mudanza a otro país o una ruptura, es útil tomarse el tiempo para lidiar con las emociones directamente. Considere reservar en persona o sesiones de terapia virtual , llevar tiempo para meditar , hable con sus seres queridos y practique sus pasatiempos favoritos para aliviar el estrés, como el yoga. Después de explorar abiertamente las emociones que le impedían despejar el desorden, es probable que le resulte mucho más fácil separarse de los elementos en sí.